¿Cómo ha cambiado su vida en los últimos años gracias a las nuevas tecnologías?
Las civilizaciones humanas antiguas y modernas se han beneficiado de las innovaciones tecnológicas, las invenciones y las aplicaciones de ingeniería utilizadas en las sociedades para realizar tareas específicas, pero también se han visto obstaculizadas por ellas. Para que las sociedades prosperen y evolucionen, las innovaciones tecnológicas se han hecho necesarias, mientras que, al mismo tiempo, la cultura, los ideales y las aspiraciones de las sociedades humanas han configurado la forma en que esas civilizaciones han creado, se han beneficiado y se han visto obstaculizadas por la tecnología. Como los sistemas tecnológicos son inventados por los humanos y reflejan la esencia misma de las necesidades y la cultura de una población, las sociedades/civilizaciones humanas y su tecnología se han vuelto inseparables entre sí. La naturaleza cíclica de la sociedad y las tecnologías es una en la que cada factor afecta en gran medida al otro, empezando por las sociedades humanas y dando lugar al desarrollo de diferentes tecnologías para satisfacer las necesidades de la sociedad. Esas tecnologías cambian el modo de comportamiento y funcionamiento de las sociedades, lo que también afecta y hace evolucionar sus economías, produciendo una potencial mayor necesidad de más tecnología, lo que da lugar a un ciclo. Esta relación codependiente de coinfluencia y coproducción ha sido así desde el principio de la historia, lo que ha dado lugar a dos formas principales de esta relación sinérgica que coevolucionan, dependiendo del tipo de sociedad en cuestión:
Ejemplos de cambios en la tecnología
Los datos e investigaciones que se presentan aquí son una recopilación preliminar o material relevante. En el futuro desarrollaremos nuestro trabajo sobre este tema (para cubrirlo con el mismo detalle que, por ejemplo, nuestra entrada sobre el crecimiento de la población mundial).
Somos una especie capaz de producir tecnología: somos capaces de entender nuestro mundo y utilizar este conocimiento con fines prácticos. La lista de tecnologías de las que dependemos cada día es larga: incluye los vehículos que nos transportan, las casas en las que dormimos, los medicamentos que nos curan y protegen, la maquinaria que utilizamos para la producción, los instrumentos para producir música y arte, y los artilugios que utilizamos para comunicarnos entre nosotros.Muchos de los desarrollos en los que nos centramos en Nuestro Mundo en Datos están impulsados por los avances tecnológicos. El cambio tecnológico fue necesario para lograr la duplicación de la esperanza de vida en todo el mundo. Y es lo que hace posible el crecimiento económico, y por tanto la disminución de la pobreza. En este sentido, gran parte de lo que escribimos aquí tiene que ver fundamentalmente con la tecnología.En esta página nos centramos en algunas de las métricas fundamentales de los avances tecnológicos, especialmente en las tecnologías que se desarrollaron muy recientemente y en las que la innovación es especialmente rápida.El cambio tecnológico no es necesariamente positivo. Algunos de los mayores riesgos a los que se enfrenta la humanidad se deben a la innovación tecnológica. Todos nuestros gráficos interactivos sobre el cambio tecnológico
Cambio tecnológico una agencia
El crecimiento económico ha sido escaso desde hace más de una década. Esto ha ocurrido en un momento en el que las economías se han enfrentado a muchos cambios. ¿Cuáles son las fuerzas del cambio, cómo afectan a la dinámica del crecimiento y cuáles son las implicaciones para la política? Un libro recientemente publicado, “Growth in a Time of Change”, aborda estas cuestiones.
Tres ingredientes básicos impulsan el crecimiento económico: la productividad, el capital y el trabajo. Los tres se enfrentan a nuevos retos en un contexto cambiante. El principal motor del cambio ha sido la tecnología, encabezada por la transformación digital.
La productividad es el principal impulsor a largo plazo del crecimiento económico. La innovación facilitada por la tecnología es el principal acicate para el crecimiento de la productividad. Sin embargo, paradójicamente, el crecimiento de la productividad se ha ralentizado con el auge de las tecnologías digitales. En las economías avanzadas de los últimos 15 años, el ritmo medio ha sido inferior a la mitad del de los 15 años anteriores. Las empresas situadas en la frontera tecnológica han obtenido importantes ganancias de productividad, pero el impacto en la productividad de las empresas en general ha sido débil. Las nuevas tecnologías han tendido a producir resultados en los que los ganadores se llevan todo. Las empresas dominantes han adquirido más poder de mercado, las estructuras de mercado se han vuelto menos competitivas y el dinamismo empresarial ha disminuido.
Ejemplos de cambios tecnológicos en las empresas
Las cifras lo respaldan. Lo más parecido que tiene la profesión económica a una medida del progreso tecnológico es un indicador llamado productividad total de los factores, o PTF. Es un concepto un poco extraño: Mide las ganancias de productividad que quedan después de contabilizar el crecimiento de la mano de obra y las inversiones de capital.
Cuando la PTF aumenta, significa que el mismo número de personas, trabajando con la misma cantidad de tierra y maquinaria, son capaces de ganar más que antes. Es nuestro mejor intento de medir el conjunto de innovaciones y mejoras difíciles de definir que mantienen el nivel de vida en alza. Significa que estamos descubriendo cómo, en la famosa formulación de Steve Jobs, trabajar de forma más inteligente. Si la PTF se estanca, también lo hace el nivel de vida.
Y la PTF se ha estancado, o al menos se ha aplanado, en las últimas décadas. Desde 1970, la PTF sólo ha crecido a un tercio del ritmo de 1920 a 1970. Si esto suena árido y técnico, me equivoco: significa que somos más pobres, que trabajamos más horas y que dejamos un mundo peor para nuestros nietos que el que tendríamos de otra manera. El Informe Económico del Presidente de 2015 señaló que si el crecimiento de la productividad hubiera seguido rugiendo al ritmo de 1948-1973, la renta media de los hogares sería hoy 30.000 dólares más alta.