Cómo refrescar el cuerpo en verano
El verano ya está aquí. Estamos deseando disfrutar de temperaturas más cálidas. Tenga en cuenta que el calor del exterior afecta a la temperatura interna de su cuerpo. ¿Sabes qué papel desempeña tu cuerpo para mantenerte fresco y bien regulado?
Cuando usted se está calentando, su cuerpo ya está trabajando para mantener un estrecho equilibrio entre la ganancia y la pérdida de calor. Las personas con enfermedades crónicas tienen un mayor riesgo de sufrir un golpe de calor. Esto puede deberse en parte a la medicación y también a la capacidad del organismo para regularse o enfriarse cuando se sobrecalienta.
La sudoración es un proceso corporal natural y esencial diseñado para ayudar al cuerpo a mantenerse fresco. Cuando la temperatura corporal aumenta, el cuerpo transpira automáticamente para liberar líquido salado de las glándulas sudoríparas y ayudar a enfriarse.
La distinción surge cuando empezamos a reconocer que sudar, o la simple transpiración, no es temporal ni nos permite refrescarnos. Cuando sudamos, también perdemos agua y electrolitos (es decir, “sales” como sodio, cloruro, potasio).
Cómo se regula la temperatura corporal
Nuestra temperatura corporal suele permanecer en un nivel fijo, pero hay muchos casos en los que, por alguna razón, la temperatura corporal desciende. Si se deja esta situación durante mucho tiempo, puede tener un efecto significativo en la capacidad de circulación de la sangre en el cuerpo.
La temperatura corporal media es de 37 °C, pero puede variar ligeramente de una persona a otra. Una temperatura corporal que puede oscilar entre 36,1°C y 37,2°C se considera normal. Pero que por alguna razón la temperatura corporal sea inferior a la temperatura superior se denomina hipotermia. Hay muchas causas posibles de hipotermia en los seres humanos, algunas de las causas se pueden enumerar como: Temperatura ambiente demasiado fría : Cuando la temperatura ambiente es demasiado fría, el cuerpo no está protegido por ropa de abrigo. la temperatura corporal descenderá. Condiciones insalubres : Una infección bacteriana o vírica puede provocar un descenso de la temperatura corporal, ya que el cuerpo lucha contra los gérmenes; sentir frío todo el tiempo también puede estar causado por la anemia o el hipotiroidismo. Beber alcohol: Parece que beber alcohol puede ayudar a mantener el calor, pero en realidad el alcohol reduce la capacidad de percibir los cambios de temperatura en el ambiente y reduce la capacidad del cuerpo para regular su propia temperatura. Por eso, si estás en un ambiente frío, eres propenso a la hipotermia. Envejecimiento: A medida que envejecemos, nuestra temperatura corporal basal es a veces más baja como parte natural de este proceso. Porque en las personas mayores se produce una disminución de la tasa metabólica basal.
Temperatura corporal y metabolismo
Temperatura corporalUn reto clave al que nos enfrentamos como seres humanos es mantener nuestra temperatura corporal interna en el intervalo de 98,6°F (más o menos unos pocos grados). Nuestros cuerpos funcionan mejor dentro de un margen de temperatura bastante estrecho, y las desviaciones de la temperatura interna -ya sean causadas por tensiones como el ejercicio o la exposición a condiciones ambientales de calor o frío- pueden tener graves consecuencias. Nos enfrentamos a estos retos estimulando un conjunto coordinado de respuestas destinadas a mantener la temperatura corporal dentro de su rango óptimo. Por desgracia, algunos de los mecanismos de los que dependemos para regular la temperatura interna pierden eficacia con la edad. Siga leyendo para conocer las mejores prácticas para gestionar estos retos estacionales de la temperatura ambiente.1 | Condiciones calurosasCuando nos exponemos a condiciones calurosas, la sudoración es uno de los principales métodos que utiliza el cuerpo para controlar su temperatura. El sudor, al evaporarse, ayuda a enfriar la piel. Los vasos sanguíneos que alimentan la piel también se dilatan, lo que permite que la sangre caliente fluya hacia la superficie de la piel. Esto ayuda a eliminar el calor del núcleo del cuerpo. Sin embargo, estas respuestas son menos eficaces a medida que envejecemos. Nuestras glándulas sudoríparas producen menos sudor y el flujo sanguíneo a la piel se reduce. Como resultado, nuestra capacidad para disipar el calor se ve comprometida.
Temperatura corporal elevada
Esta alteración de la temperatura corporal del animal puede generar no sólo cambios en el estado de ánimo, sino también importantes problemas de salud que conviene evitar. Por ello, en el siguiente post te contamos cuál es la forma en la que debes actuar ante el aumento de la temperatura corporal de tu mascota.
Al igual que en las personas, la termorregulación es la encargada de regular la temperatura corporal en los animales y mantenerla dentro de un rango constante y equilibrado. En caso de que la temperatura aumente, nos encontramos ante un proceso febril, que puede estar causado por agentes externos de origen microbiano o no microbiano.
En general, la causa más común de fiebre en los animales de compañía es de naturaleza infecciosa. También puede generarse debido a otros factores como inflamaciones, problemas inmunitarios y alteraciones neoplásicas. En otros casos menores, no existen causas específicas.
Ante la sospecha de fiebre en la mascota, lo mejor es medir la temperatura rectal con un termómetro. Una temperatura superior a 39 grados puede considerarse moderada, mientras que si supera los 41 grados ya se trata de fiebre alta.