Introducción de nuevas tecnologías en la empresa
A pesar de todos los dólares que gastan las empresas estadounidenses en I+D, a menudo sigue existiendo una brecha persistente y preocupante entre el valor inherente de la tecnología que desarrollan y su capacidad para ponerla en práctica de forma eficaz. En una época de feroz competencia mundial, la distancia entre las promesas técnicas y los logros reales es un asunto especialmente preocupante. Basándose en su largo estudio de las dificultades que han tenido los directivos para cerrar esta brecha, los autores identifican media docena de retos clave que los directivos responsables de la implantación de nuevas tecnologías deben superar: su ineludible doble papel, la variedad de mercados internos a los que hay que servir, la resistencia legítima al cambio, el grado adecuado de promoción, la elección del lugar de implantación y la necesidad de que una persona asuma la responsabilidad general.
La introducción del cambio tecnológico en una organización presenta un conjunto de retos diferentes para la dirección que la labor de administración competente de un proyecto. Sin embargo, a menudo los gestores responsables de llevar una innovación técnica al uso rutinario están mucho mejor equipados por su formación y experiencia para guiar el desarrollo de esa innovación que para gestionar su aplicación.
Introducción de nuevas tecnologías (NTI)
En concreto, vamos a cubrir conceptos relacionados con: big data, inteligencia artificial, aprendizaje automático, inteligencia colectiva y blockchain. Al final de este módulo, esperamos que seas capaz de describir estas cinco tecnologías, y que puedas señalar ejemplos concretos de cómo los gobiernos han utilizado estas tecnologías
En la creación y prestación de políticas y servicios públicos, el análisis de big data ofrece la posibilidad de comprender el rendimiento pasado, permitir intervenciones más adaptadas en el presente y ayudar a predecir los resultados futuros.
Correcto. Tanto si se trata de los conocimientos de expertos acreditados como de la experiencia vivida por las personas afectadas por un problema, o una mezcla de ambos, la inteligencia colectiva reúne a las personas adecuadas para resolver los problemas.
Cómo introducir una nueva tecnología en una organización
A la gente no le gustan los cambios. Eso es especialmente evidente en el lugar de trabajo, sobre todo cuando se trata de tecnología. Mientras que algunas personas ven el valor inmediato de adoptar una nueva tecnología, muchas no lo ven. Tal vez sea la dificultad que se percibe en la implantación de una nueva forma de trabajar, o tal vez los beneficios no se hayan articulado con claridad. En cualquier caso, es importante planificar cuidadosamente la implantación de una nueva tecnología.
Comunique lo antes posible que está investigando una nueva tecnología y describa los beneficios y el impacto para todos. Explique abiertamente cómo apoya y se alinea con los objetivos de la empresa. Involucre a los principales interesados desde el principio para conseguir su aceptación e identificar los problemas.
La negatividad puede propagarse fácilmente en el lugar de trabajo. Consiga que algunas personas de todos los niveles ayuden a los demás a entender las ventajas de la nueva tecnología. Muestre a sus defensores las ventajas claras y los resultados previstos de la nueva solución para que puedan expresar y demostrar fácilmente su apoyo. Asegúrese de que todo el equipo directivo respalda el cambio y actuará como campeón.
Adopción de nuevas tecnologías
Nuestra sociedad está siendo reconfigurada por los rápidos avances en las tecnologías de la información -ordenadores, redes de telecomunicaciones y otros sistemas digitales- que han aumentado enormemente nuestra capacidad de conocer, conseguir y colaborar (Attali, 1992; Brown, 2000; Deming y Metcalfe, 1997; Kurzweil, 1999). Estas tecnologías nos permiten transmitir la información de forma rápida y amplia, conectando lugares distantes y diversos ámbitos de actuación de formas nuevas y productivas, y crear comunidades que hace apenas una década eran inimaginables.
Por supuesto, nuestra sociedad ya ha pasado por otros periodos de cambios drásticos, impulsados por innovaciones como la máquina de vapor, el ferrocarril, el teléfono y el automóvil. Pero nunca antes habíamos experimentado tecnologías que evolucionaran tan rápidamente (multiplicando su potencia por cien cada década), alterando las limitaciones de espacio y tiempo, y remodelando la forma en que nos comunicamos, aprendemos y pensamos.
La rápida evolución de las tecnologías digitales está creando no sólo nuevas oportunidades para nuestra sociedad, sino también desafíos para ella1 , y las instituciones de todo tipo están tratando de responder adaptando sus estrategias y actividades. Las empresas y los gobiernos se están reorganizando para aumentar la productividad, mejorar la calidad y controlar los costes. Industrias enteras se han reestructurado para adaptarse mejor a las realidades de la era digital. No es exagerado decir que la tecnología de la información está cambiando fundamentalmente la relación entre las personas y el conocimiento.