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SHINE (Más allá de los límites): El motor de inferencia de la salud de las naves espaciales (SHINE) del Laboratorio de Propulsión a Chorro se puso a prueba por primera vez cuando descubrió una anomalía en el sistema de telemetría de la nave Voyager justo antes de su encuentro con Neptuno en 1989. Desde entonces, el software se ha utilizado para supervisar la salud de una serie de sistemas de la NASA (Foto: Cortesía de la NASA)
El consolidado programa de transferencia de tecnología de la NASA se está extendiendo para apoyar a las empresas de nueva creación y a un mayor número de emprendedores, permitiendo que los inventos de la era espacial transformen productos que van desde las bicicletas hasta los dispositivos médicos.
En 2022, una empresa estadounidense llamada The SMART Tire Company lanzará un tipo de neumático completamente nuevo para bicicletas de montaña. Fabricado con una aleación de níquel y titanio, el neumático METL no tiene aire y es superelástico: durará mucho más que los neumáticos de goma estándar, no se pinchará nunca y generará muchos menos residuos.
Pero la tecnología del neumático METL no procede de un fabricante de neumáticos o de automóviles. Se desarrolló en el Centro de Investigación Glenn de la NASA, en Cleveland. La idea de un neumático no neumático se remonta al rover lunar de los años sesenta. Desde entonces se está desarrollando, y también está previsto que se utilice en el Fetch Rover que irá a Marte en 2026.
Noticias de la Nasa
La Oficina del Jefe de Tecnología (OCT) de la NASA ha comenzado a reconstruir el programa de tecnología espacial avanzada de la agencia con planes expuestos en 14 borradores de hojas de ruta tecnológicas. Hace años que la NASA no tiene un programa vigoroso y amplio de desarrollo de tecnología espacial avanzada y su base tecnológica se ha agotado en gran medida. Sin embargo, el éxito en la ejecución de las futuras misiones espaciales de la NASA dependerá de desarrollos tecnológicos avanzados que ya deberían estar en marcha. Con el fin de involucrar a la comunidad técnica externa, el Consejo Nacional de Investigación (NRC) consideró los 14 borradores de hojas de ruta tecnológicas preparadas por la OCT y clasificó los principales retos técnicos y las tecnologías más prioritarias en las que la NASA debería hacer hincapié en los próximos 5 años. Este informe proporciona orientaciones y recomendaciones específicas sobre cómo puede mejorarse la eficacia del programa de desarrollo tecnológico gestionado por el OCT ante la escasez de recursos.
Consejo Nacional de Investigación. 2012. NASA Space Technology Roadmaps and Priorities: Restoring NASA’s Technological Edge and Paving the Way for a New Era in Space. Washington, DC: The National Academies Press. https://doi.org/10.17226/13354.
Nasa james webb
No cabe duda de que la NASA ha sido responsable del desarrollo de algunas de las tecnologías más importantes del último medio siglo. De hecho, la NASA cuenta con un rico historial de avances sorprendentes en ciencia y tecnología, y su influencia se ha dejado sentir en casi todos los sectores y en todos los estadounidenses, y no es una exageración.
Resulta que la investigación y el desarrollo en el espacio se aplica de forma notable aquí en la Tierra, y tiene un impacto en todo, desde la asistencia sanitaria hasta la tecnología de los videojuegos. ¿Escéptico? No hace falta indagar mucho para ver cómo la agencia espacial ha ayudado a impulsar la innovación estadounidense e incluso el crecimiento económico desde su creación: La NASA ha relatado convenientemente su larga lista de éxitos a través de su publicación “Spinoff”, producida anualmente desde la década de 1970.
Ahora que SpaceX, de Elon Musk, y Virgin Galactic, de Sir Richard Branson, están ayudando a reavivar el interés y el entusiasmo por los viajes espaciales, pensamos que era la oportunidad perfecta para destacar las inmensas contribuciones que la NASA y sus programas de I+D espacial han hecho a la vida cotidiana. Aunque “Spinoff” ha relatado más de 1.800 avances de este tipo a lo largo de su historia, hemos elegido un puñado de los descubrimientos más interesantes y sorprendentes.
Logotipo de la Nasa
Con el lanzamiento del Sputnik en 1957 y el posterior inicio de la era espacial, la progresión de las Tecnologías Espaciales ha permitido, por un lado, el desarrollo de cientos de aplicaciones (Pelton et al., 2017) que utilizan datos de satélites, incluyendo dispositivos de uso cotidiano, desde televisores por satélite hasta el Satnav de nuestros coches. Por otro, ha apuntalado el progreso científico en las Ciencias de la Tierra y la Atmósfera, así como en la Astronomía y la Astrofísica. Por recordar algunas de las contribuciones de mayor repercusión pública en este campo, las mediciones por satélite mostraron el alcance de la disminución de la capa de ozono en la atmósfera y se ha confirmado la existencia de exoplanetas y agujeros negros, entre otros muchos avances científicos.
Al mismo tiempo, estas misiones espaciales han proporcionado poderosas imágenes icónicas para la humanidad, y fotos como la de la Canica Azul (Wuebbles, 2012) se han convertido en símbolos universalmente reconocidos de nuestro planeta y de su extraordinario entorno y sus recursos finitos.
Aunque el espectacular progreso de las tecnologías espaciales se ralentizó a finales del siglo pasado, junto con el de todo el sector aeroespacial, se siguieron consiguiendo logros muy importantes. Entre ellos, el desarrollo de la Estación Espacial Internacional y la exploración robótica de otros planetas y cuerpos celestes, ¡incluso el aterrizaje en un cometa!