¿Puede la inteligencia artificial ser humana?
A diferencia del cerebro humano, que puede realizar múltiples tareas a la vez, los ordenadores deben “pensar” de forma lineal para alcanzar la inteligencia. A pesar de esta limitación, hay muchas áreas en las que la IA ya ha avanzado más allá de la inteligencia humana. Con tecnologías como las redes neuronales profundas, las máquinas han aprendido a hablar, conducir coches, ganar videojuegos, pintar cuadros y ayudar a realizar descubrimientos científicos.
La inteligencia artificial tiene un buen historial de reconocimiento de imágenes y objetos. Las redes de cápsulas creadas por Geoffrey Hinton han reducido casi a la mitad la mejor tasa de error anterior en una prueba que reta al software a reconocer juguetes como camiones y coches desde distintos ángulos. Aunque el ángulo de visión sea diferente al de las vistas analizadas anteriormente, estas cápsulas utilizan la generalización de los objetos en un espacio geométrico para que el sistema identifique mejor los objetos y, además, requiera menos imágenes para hacerlo.
Otro ejemplo proviene de una red de última generación que ha sido entrenada para marcar imágenes en una base de datos de forma que pueda clasificarlas mejor que un médico con más de 100 horas de entrenamiento en la misma tarea.
El auge de la inteligencia artificial
Una demostración de un sistema de reconocimiento de vehículos y personas para uso de las fuerzas del orden en la Conferencia de Tecnología de la GPU celebrada el año pasado en Washington, que pone de relieve los nuevos usos de la inteligencia artificial y el aprendizaje profundo. (Saul Loeb/AFP/Getty Images)
La vida digital está aumentando las capacidades humanas y perturbando actividades humanas de hace siglos. Los sistemas impulsados por códigos se han extendido a más de la mitad de los habitantes del mundo en la información ambiental y la conectividad, ofreciendo oportunidades antes no imaginadas y amenazas sin precedentes. A medida que la inteligencia artificial (IA) impulsada por algoritmos emergentes sigue extendiéndose, ¿estará la gente en mejor situación que la actual?
Los expertos predijeron que la inteligencia artificial en red amplificará la eficacia humana, pero también amenazará la autonomía, la agencia y las capacidades humanas. Hablaron de las amplias posibilidades: los ordenadores podrían igualar o incluso superar la inteligencia y las capacidades humanas en tareas como la toma de decisiones complejas, el razonamiento y el aprendizaje, el análisis sofisticado y el reconocimiento de patrones, la agudeza visual, el reconocimiento del habla y la traducción de idiomas. Dijeron que los sistemas “inteligentes” en las comunidades, en los vehículos, en los edificios y en los servicios públicos, en las granjas y en los procesos empresariales ahorrarán tiempo, dinero y vidas y ofrecerán oportunidades para que los individuos disfruten de un futuro más personalizado.
Investigación sobre inteligencia artificial
En otra advertencia contra la inteligencia artificial, Elon Musk dijo que es probable que la IA supere a los humanos en los próximos cinco años. Dijo que la inteligencia artificial será mucho más inteligente que los humanos y que superará a la raza humana en 2025.
“Pero eso no significa que todo se vaya al infierno en cinco años. Sólo significa que las cosas se vuelven inestables o extrañas”, dijo Musk en una entrevista con el New York Times. También dijo que las cosas serán raras cuando los ordenadores sean mucho más inteligentes que los humanos.
En su intervención en la conferencia tecnológica South by Southwest (SXSW) 2018 en Austin, Texas, había dicho que la IA es mucho más peligrosa que las armas nucleares y que el hecho de que no haya un organismo regulador que supervise su desarrollo es una locura.
Anteriormente había incluso llamado a la IA un dictador malvado y que mientras los humanos morirán pero para una IA, no habría muerte. Vivirá para siempre. “Y entonces tendríamos un dictador inmortal del que nunca podríamos escapar”, había dicho.
Musk también ha sido noticia últimamente no sólo por haber enviado astronautas al espacio, sino por su gran interés en fusionar la IA y los humanos con Neuralink. También está trabajando para crear coches totalmente autónomos que se conduzcan solos para finales de este año.
Wikipedia
La singularidad tecnológica -o simplemente la singularidad[1]- es un punto hipotético de la historia en el que el crecimiento tecnológico será radicalmente más rápido e incontrolable, lo que provocará cambios imprevisibles en la civilización humana[2][3] Según la versión más popular de la hipótesis de la singularidad, el modelo de I.J. Good, un agente inteligente mejorable acabará entrando en una “reacción desbocada” de ciclos de auto-mejora, apareciendo cada vez más rápidamente una nueva generación más inteligente, provocando una “explosión” de inteligencia y dando lugar a una poderosa superinteligencia que supera cualitativamente toda la inteligencia humana[4].
La primera persona que utilizó el concepto de “singularidad” en el contexto tecnológico fue John von Neumann[5]. Stanislaw Ulam relata una discusión con von Neumann “centrada en el progreso acelerado de la tecnología y los cambios en el modo de vida humano, que da la impresión de acercarse a alguna singularidad esencial en la historia de la raza más allá de la cual los asuntos humanos, tal como los conocemos, no podrían continuar”[6] Autores posteriores se han hecho eco de este punto de vista[3][7].